sábado, 18 de enero de 2014

Sublimes Instantes...

Te miré y tú a mi, 
sonreí y ambos
nos provocamos,
te gusté...
Y yo te amé
desde el momento
que en tus ojos
me miré.

Y con miradas
provocadoras
nos deseamos,
nos desnudamos
y suavemente
nos acariciamos.

Y el juego empezó
con tus labios en mis senos
y tu lengua juguetona
que acariciaba mis pezones
y mis manos que sin perder
tiempo se introducía
en tu virilidad,
pero lentamente
ibas bajando hasta
llegar a mi vientre
y más abajo de el.

Oh! Qué atrevidos eran
tus labios que osaban
besar mi entrepierna
cuando tus manos
se aferraban a mi cadera
y tu lengua qué se paseaba
en la profundidad de mi ser.

Y fue ahí cuando la entrega
fue acompañada de jadeantes
y armoniosos gemidos...
¡Sublimes instantes!

Pasión, deseos y entrega sin frenesí...

Y fue entre caricias, besos y más
besos que dos cuerpos terminaron
enlazados y aferrados ante tan
deseada entrega.

No hay comentarios:

Publicar un comentario