No le temo a la soledad
pero si a tu ausencia,
no tengo temor en amarte,
pero si a esos finales cuando
los besos saben a olvido.
No soporto el frío
si en tus labios te llevas calor.
No huyo del amor,
si con amarte vivo.
No lloro por que las rosas tengan espinas,
sonrió por que las espinas tienen rosas...
No tengo temor amarte,
así pague con intereses
el dolor de tu olvido.
No lo sé ni como fue
pero llegaste de nuevo
y revivió el amor,
dije que nunca más pasaría
y veme aquí,
igual que el primer día.
Quizás esto no sea eterno,
pero puedes estar seguro
que viviré y disfrutaré el momento.
Y si amarte de la manera que te amo
es un castigo divino,
créeme que con intereses
pagaría el delito.
Hoy Pensé en ti
y me entregué como lo hacía
en esas noches de amor
sin fin...
Donde mis manos recorrían
cada comisura de tu cuerpo
y mis labios ardían sobre tu ser.
Me acaricio e imagino
que son tus manos explorando
las montañas de mis senos endurecidos,
que son tus besos bajo mi ombligo,
que es la humedad de tu boca
entre mis piernas.
Hoy te hago el amor sin tenerte
a mi lado, me embriago de tu aroma,
de tu pasión, del calor de tus caricias.
Y así mi alma se aferra a tus recuerdos
en esta noche de fantasías,
donde llegué al éxtasis con solo pensarte.
Hoy te necesito,
anhelo tu calor
y sentir la intensidad de tu pasión
para no morir por esta necesidad
de tí.
Alimentar mi amor
es pensarte en mis noches
de nostalgias, es escribir versos
y poemas sobre la desnudez
de tu piel.
Estar contigo es,
vivir un sueño en el cual
te hago el amor sin estar
a tu lado...
estar contigo es,
perderme en la noción del tiempo,
es besar la tierra
y sacar esperanzas
de lo profundo de ella.
Tener fe es esperarte
todas las noches en el mismo lugar
y hacerte el amor una y otra vez.
Soñarte es hacer volar mi imaginación
y recorrer cada rincón
de tu alma desnuda...
Ser feliz es guardar
y acumular toda esta loca pasión,
para no morir por está necesidad de ti.
