porque en cada pensamiento esta tu rostro.
Escribo cuando mi alma sangra
llena de nostalgia.
Escribo como fiera en celo, cuando veo tus huellas en el camino,
marcas en la arena de un mar agitado.
Rasgo la vida, cuando tus huellas se pierden ante mis ojos
gimo, clamó, pero tan solo escucho el eco de mi voz, junto al mar
embravecido...
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